sábado, 8 de enero de 2011

Cuarteles de Invierno


Estoy aquí y a la vez huyo.
Ajusto la mirada al paisaje,
la debilidad del sol es desmesuradamente hiriente.
La falta de luz me desgarra, la oscuridad me hace daño.

Trazo un ruta dentro de un plano;
los surcos sucios de los abrazos
y el calor de una lágrima
resbalando por las arrugas de la comisura
de los besos no dados.

Una pantalla enorme en el escaparate
me desdibuja el dolor de un tiempo pasado.
Es como un sueño malo, como un grito ahogado.

Centenares de insectos me pellizcan los hombros.
Corro, no sé dónde está el primer peldaño.
Y no hay por dónde empezar.
Aún estamos en la estación más fría del año.

El viento me salva.
La espera me espanta.
Soy el camino y soy la distancia.