Huele a café:
turno de noche.
El frío se cuela
en el silencio de la habitaciones.
El reloj retrasa las horas,
y a la vez da bostezos de aliento
al futuro.
Agujas disonantes
trepan por los brazos.
Líquidos innombrables
recorren los pasillos.
Segunda planta:
primera herida.
2 comentarios:
Sabes que cada vez eres más grande? Sólo espero que la inspiración no te haya venido de nada demasiado serio. Un beso muy grande!
Ay, mi doctora, de lo más serio, por eso te decía el otro día que no tenía cuerpo para concierto (yo!!). Te sigo debiendo ese mail, y te cuento.
BESOS!!!
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